miércoles, 6 de agosto de 2014

OBREROS LIBRES EN JESÚS

En la antiguedad, cuando se formaron los grandes imperios como el Babilónico, el persa, el alejandrino y el romano, los pueblos sometidos y los prisioneros de guerra se convertían en esclavos de dichos conquistadores. La situación era aberrante desde el punto de vista de la categorización que alcanzaban estas persona sometidas, considerados como esclavos que en términos legales no les identificaba como personas,  dado el caso, sino como objetos de uso diario. Todo lo que eran pertenecía a su amo, sus esposas, hijos y bienes materiales, no podían tener ningún sentido de pertenencia ni arraigo; vivían de acuerdo al ánimo de sus amos. Que podía pasar por la mente de un hombre en estas condiciones?, creo que revelarse era su pensamiento cotidiano, buscar la forma de cambiar su injusto destino, llevarse su familia a territorios donde pudieran desarrollar una vida libre y ajena a todo lo que es maltrato y sometimiento violento. Cuando el imperio romano estaba en su esplendor apareció un predicador llamado Pablo, siervo de Jesucristo, con el postulado de libertad jamás soñado por un esclavo de la época. Pronuncio el siguiente enunciado: " Esclavos, obedeced en todo a vuestros amos terrenales, no sirviendo al ojo, como los que quieren agradar a los hombres,sino con corazón sincero, temiendo a DIOS. Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón como para el SEÑOR y no para los hombres, sabiendo que del SEÑOR recibiréis la recompensa de la herencia, porque a CRISTO el SEÑOR servís. Pero el que  actúa con injusticia recibirá la injusticia que haya cometido, porque no hay acepción de personas. (colosenses3: 22-25).
Este hermoso enunciado evangelico presenta una convergencia total, ciento ochenta grados de giro. El pensamiento de DIOS va en la dirección contraria al la del hombre. Como lo exprese antes, el pensamiento del esclavo podría tener la tendencia contraria a lo que expresa la palabra de DIOS. Aquí predomina la palabra obediencia, y lo dice en tiempo imperativo; obedeced en todo, no murmurando ni contradiciendo la voluntad de su amo, sino mirando que el servicio que a él le hace, lo hace, como si fuera para el SEÑOR. Esta es la libertad a la que eran llamados, porque en CRISTO  ya no cuenta ser libre o esclavo, cuenta que somos hijos de DIOS aceptos en el amado por el sacrificio de Nuestro SEÑOR JESUCRISTO en la cruz del calvario dándonos esa libertad espiritual que ha desatado todas las cadenas que nos llevaban de cabresto hacia el infierno. Es una libertad sublime que vemos desde los lugares celestiales, es el gozo inefable de tener a CRISTO en nuestro corazón palpitando eternamente, es la paz mental y física que solo DIOS puede dar.Porque:" ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre, no hay hombre ni mujer, porque todos vosotros sois uno en CRISTO JESÚS"(Galatas3:28).
Hoy día podemos tener verdugos en nuestros lugares de trabajo, en el colegio, en la universidad y aún en nuestras propias casas, y sus ordenes pueden ser contradictorias o arbitrarias llevándonos muchas veces a querer ser contestarios y no obedecerles en nada. Pero siendo ahora libres en CRISTO tenemos que vivir nuestra libertad sin ninguna autorestricción, por el contrario, cumplir nuestras obligaciones y trabajos haciéndolo siempre como para el SEÑOR, estableciendo un testimonio unilateral de la libertad que ahora disfrutamos. La igualdad en CRISTO va más allá de nuestras   raza, nacionalidad y cultura, eliminando así cualquier discriminación por estatus social o de sexo; sabiendo que todo el bien que hagamos será retribuido por el SEÑOR, sea un esclavo o un libre.
Cuando trabajamos haciéndolo como para el SEÑOR la carga de la labor se torna liviana, la energía corporal y espiritual son dinámicas, el gozo reemplaza el cansancio que deja el trabajo y lo más importante, dejamos un testimonio con el cual glorificamos al DIOS todopoderoso. Nos covertimos en tierra deseable despertando así curiosidad por nuestra manera de vivir; es anteponer la buena voluntad a la pereza.Todos debemos servir por amor a los demás, haciendo cada oficio con sinceridad apropiandonos de la la palabra de DIOS y aplicándola a nuestras vidas; pensando que la empresa, el negocio, el colegio, la iglesia, el estado o cualquier otra entidad donde nos desempeñemos nuestro servicio como si fueran nuestros. El sentido de pertenencia nos ubica en la senda correcta y determina la calidad de nuestro servicio y con mayor razón en la obra del SEÑOR.
Ahora veamos la ordenanza para los amos ( jefes): " Amos, haced lo que es justo y recto con vuestros esclavos, sabiendo que también vosotros tenéis un amo al los cielos"(Colosense 4:1).  La justicia y la equidad deben prevalecer en las desiciones que tomen los que hoy ejercen liderazgo porque de este tendrán que dar cuentas ante DIOS en la  instancia que  EL lo determine en su soberanía, es decir, el ser jefes o comandantes no los exonera de ser responsables ante DIOS y la sociedad por sus actuaciones.
En conclusión la libertad en CRISTO nos brinda la oportunidad de tener una vida diferente, apaciguada en el amor y la dignidad cristiana, cultivando las buenas costumbres, siendo humildes como lo fue JESÚS cuando habitó entre nosotros, que  siendo el mismo DIOS no escatimó humillarse siendo el siervo perfecto para nuestra salvación, es desarrollar una vida valiente y esforzada en todas las actividades que nos son asignadas. La biblia dice: Todos los que están bajo el yugo de esclavitud, tengan a sus amos por dignos de todo honor, para que no sea blasfemado el nombre de DIOS y la doctrina. Y los que tienen amos creyentes no los tengan en menos por ser hermanos, sino sirvanlos mejor, por cuanto son creyentes y amados los que se benefician de su buen servicio. esto enseña y exhorta" (1 Timoteo 6: 1-2). Primero, nuestro irregular comportamiento puede llevar a los jefes a rechazarnos y declarar que si así se comportan los hijos de DIOS para que anhelar ser como ellos; y segundo, debemos conservar las distancias con mayor razón si trabajamos para un hermano en la fe, la obligación es servir con más amor, teniendo más cariño por la labor ya que el beneficiario va ser nuestro hermano.
Hoy la invitación es a vivir en la libertad de nuestro SEÑOR JESUCRISTO, la única manera de hacerlo es aceptándole como su SEÑOR y salvador, arrepintiéndose de la vida pecaminosa que ha traído  durante el transcurso de su vida. comprender esta liberta conlleva el conocerle cada día más, entablar una relación personal con JESÚS y así gozar de las mieles de la libertad eterna. Ven a EL y clamale por tu salvación y serás una nueva criatura, libre y llena de felicidad.